Loading....

Miembros de nuestros grupos de acompañamiento nos comparten

Me apasiona mi profesión porque desde los 5 años quería ser médico veterinario. Trabajar y que me paguen por lo que más me gusta hacer es un sueño en realidad. Lo mínimo que puedo hacer en respuesta es intentar ser mejor cada día. Atender caballos es especial. Ellos tienen su lenguaje pero no pueden decirnos en el nuestro qué les molesta. Uno, en cambio, tiene qué aprender a hablar ese lenguaje para que primero nos dejen acercarnos y luego podamos entender qué sucede; algo parecido a las personas dentro del espectro autista dentro de un mundo no-autista. CCV
Para mí es magia la creación de objetos desde materiales simples. Como se va formando la prenda desde un sencillo estambre; como a pesar de ser la misma pieza de cerámica cada persona la pinta diferente, regalándonos una muestra de sus diferentes formas de ver la vida; la posibilidad de hacer un plushie de mi personaje favorito como yo me lo imagino. Estas son unas de las actividades que me permiten materializar mi mundo interior y disfruto sentir como fluyen las ideas mientras mis manos en sus movimientos repetitivos me relajan. Sj
Por mi condición autista, me gusta prestar atención a los detalles, no a todos, sólo a los que llaman mi atención. En la cocina puedo encontrar esto, como la harina, el agua y el aceite se convierten en masa para pan en mis manos, siempre y cuando use la proporción correcta; como picar diferentes ingredientes en diferentes formas y cocinarlos en distintos tiempos e intensidad de calor, pueden lograr sabores distintos. En eso disfruto mucho ser diferente. Paris

Para ver y escucharlo mejor, ponle en HD, la mayor calidad.
Hazlo de todas formas, Miguel Ángel

https://youtube.com/watch?v=QIBNFgXphuc
Pasé una semana sin dormir casi nada y sin poder concentrarme en otra cosa más que en resolver el cubo rubik por primera vez, hasta que lo logré. Fue muy estresante y sentía que si no podía hacerlo era porque no era lo suficientemente inteligente. Ahora que lo pienso si no hubiera podido hacerlo no pasaba nada y eso no me hacía menos ni me iba a probar nada. Ya que entendí eso, empecé a disfrutar los cubos. Ya no son un reto, son una pasión y algo que me gusta mucho; armarlos, coleccionarlos, etc. Creo que me gusta la idea del orden, de seguir los pasos para resolverlos. Hay millones de posibles combinaciones de colores y si sigues los mismos pasos siempre llegas al resultado final, eso me asombra mucho. ¡Es una disciplina muy divertida y colorida! Ana
Back To Top
WhatsApp Contáctanos